¿Dónde están tus orejas? Cuando pedimos a un niño/a que señale las partes de su cuerpo para aprenderlas y coordinar el movimiento reconociéndolas está haciendo un trabajo de propiocepción. Es un proceso fácil y automático porque el cerebro puede sentir el cuerpo, así como su posición y movimiento a través del espacio. Este sentido no es tan conocido y a menudo pasamos por alto porque solo se distingue sutilmente del movimiento. Sin la información sensorial proveniente de nuestros músculos, seríamos incapaces de monitorear y corregir nuestras trayectorias de movimiento.
En ocasiones este sentido tiene problemas de procesamiento. Hay niños que tienen disfunción propioceptiva. No es que sean torpes o descoordinados. Simplemente que su necesidad para procesar esta información es diferente. Es como sentir que tienes que caminar pero no te acuerdas de dónde tienes las piernas. Las dificultades propioceptivas entre los niños pueden contribuir a la disminución de la planificación motora y el control postural, lo que lleva a conductas desadaptadas que afectan negativamente su participación en las tareas diarias. Habitualmente necesitan chocar por ejemplo.
En los niños neurotípicos la propiocepción se desarrolla con actividades de juego de motricidad gruesa. Explorar y moverse en el entorno diario. La plasticidad cerebral de la etapa de la infancia es enorme y es obligación del adulto fomentarla. En cualquier caso hay que promover el desarrollo de un sistema propioceptivo saludable. Es nuestro papel ofrecer la estimulación correcta y como ya sabrás, las posibilidades de regulación de una Sala Snoezelen son incomparables. En ese entorno la estimulación multisensorial conecta directamente con las necesidades particulares de cada usuario y la sesión tienes efectos positivos (demostrados científicamente y con experiencias reales que ya he vivido).
La estimulación multisensorial debe trabajar con los siete sistemas sensoriales (visual, táctil, auditivo, olfativo, gustativo, vestibular y propioceptivo). Sin que ninguno sea predominante frente al resto. A veces se suele recargar visualmente las sesiones y eso es totalmente desaconsejable. Siempre la propiocepción debe tener su espacio en la Sala Multisensorial, en armonía y equilibrio con propuestas de otros sentidos.
¿Cómo estimular la propiocepción?
Hay diversas opciones en las que debemos buscar los contrastes.
- Movimiento libre: saltar, trepar, gatear, rodar, caer, caminar o correr;
- Fuerza sostenida: levantar y/o cargar un objeto pesado;
- Fuerza dinámica: empujar o tirar de algo, hacer flexiones;
- Presión profunda en los músculos (lo explicaré más adelante porque es la opción más recurrente en sesión Snoezelen)
En algunos niños, especialmente aquellos con trastorno del espectro autista (TEA) o con trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad (TDAH), la integración sensorial puede estar alterada. Hay un exceso de estímulos que no se pueden modular y filtrar creando un sentir demasiado. Es afluencia excesiva de estimulación sensorial que puede impedir funciones ejecutivas como el foco, la concentración.
Las actividades de propiocepción combaten esto al hacer consciente de su propio cuerpo y relajar. Esto debe realizarse en conjunto de reducir al máximo el resto de estímulos de otros sensorios. Por eso. la Sala Snoezelen es imprescindible en el acompañamiento a niños con necesidades educativas especiales y beneficiosa para el resto de niños en general. En cualquier caso una sesión bien hecha mejora las capacidades atencionales.
Presión profunda
El trabajo del profesional en Sala Snoezelen debe ser realizado por una persona formada para poder aplicar la metodología. Como sabrás lo suyo es capacitarse como terapeuta internacional ISNA, que es la asociación que vela por el cumplimiento y estándares de las práctica Snoezelen. En la formación que imparto en tres módulos profundizamos en la importancia del contacto. La presión profunda es una de las vías del trabajo propioceptivo.
Uno de los mitos que rodean a Snoezelen es pensar que esto es dar masajitos con lucecitas puestas. Cómo, cuándo, con qué y para qué es algo necesario de abordar para que la práctica cobre sentido (nunca mejor dicho). A continuación te presento uno de los materiales que se pueden incluir en el apartado de presión profunda y que el profesional aprende a introducir y usar en la formación. Es el kit de masaje sensorial que comercializa Hermex, junto a muchas otras opciones de equipamiento para tu Aula multisensorial.
Otras opciones del trabajo propioceptivo pueden ser ofrecer una manta sensorial con peso, la piscina de bolas… Sea cual sea el material que se va a ofrecer lo importante es la regulación del contacto, que basado en el perfil sensorial, realiza en profesional. Solo buscamos sentir plenamente para favorecer la conexión de los niños con ellos mismos y con el entorno. Cuando ves sus reacciones es cuando aparece la magia de Snoezelen, el arte del contacto. Les ves felices solo en la Sala Snoezelen son tocados y sentidos plenamente.
2 comentarios en “La propiocepción en Sala Snoezelen”
¡Hola! Me surge una duda al leer este post. En mi caso siempre he leído y estudiado que la presión profunda entra dentro del sistema táctil, ya que los receptores táctiles son diferentes a los propioceptivos. ¿Sería entonces la presión o tacto profundo un estímulo diferente al propioceptivo? ¿Por qué sí o por qué no? ¡Gracias!
Es una estimulación táctil pasiva pero que en Sala Snoezelen se hace el masaje propioceptivo en los perfiles sensoriales con hiposensibilidad (y otras alteraciones en el procesamiento) para ayudar a ser conscientes de su propio cuerpo, rebajar el tono muscular, ayudar a reducir estereotipias y relajar en general. En la intervención se trabaja la activación de los siete sentidos, pero de una forma controlada que no produzca sobre estimulación. Lo importante es saber el caso concreto que tenemos delante y saber leer con el cuerpo sus respuestas